Un agradecimiento muy especial al presbitero Bernardo Gallego por la gestión que ha echo para que la pista de aviación de nuestro corregimiento vuelva otra vez a funcionar. Gracias a él por gestionar ante la Aeronáutica y al señor alcalde Carlos Mario Gallo por prestarle la maquinaria para organizarla.
Estas son algunas evidencias del trabajo que se realizó el lunes 22 de marzo con las comunidades de La Esperanza, La Francia, Las Pipas y San Sereno... y tambien algunos del pueblo. Al rededor de unas 300 personas entre hombres y mujeres fueron las encargadas de alambrar la pista para que ningun animal dentre, porque entre todos debemos de cuidarla.